WORLD ON FIRE (10 DE ABRIL DE 2015) -AVISO SPOILERS-
Es curioso que un episodio de una serie -que me gusta mucho- sobre un superhéroe callejero nos cuente la historia de tres parejas. Primero, el héroe, Matt Murdock (Charlie Cox), y su enfermera, Claire Temple (Rosario Dawson), se besan por primera vez. Paralelamente, el socio del héroe, Foggy Nelson (Elden Henson) y su secretaria, Karen Page (Deborah Ann Woll) parecen preparados a dar un paso más en lo que hasta ahora es una amistad. Por último, el villano de Daredevil, Wilson Fisk (Vicent D´Onofrio) disfruta de una segunda cita con Vanessa (Ayelet Zurer) en la que ambos ponen las cartas sobre la mesa. O más bien, una pistola, porque el momento íntimo aquí es la entrega de un arma que Vanessa le cede a Fisk. Es una demostración de confianza mucho más importante que un beso. La velada se cierra con las románticas vistas de varias explosiones en la ciudad que el propio Fisk ha encargado para eliminar a sus exsocios de la mafia rusa. Esos explosivos, que ponen en riesgo las vidas de Matt, Foggy y Karen, sellan el romance entre Wilson y Vanessa.
Las explosiones son además el clímax de la historia y podrían relacionarse con el título del episodio: World on Fire. Pero éste en realidad recoge una frase de Matt Murdock, que resume la explicación que da a Claire de cómo "ve" el mundo con su "sentido-radar": como si todo estuviera en llamas. Una idea visual muy coherente con un personaje llamado Daredevil cuyo territorio es conocido como Hell´s Kitchen.
Es este un episodio con mucho diálogo, pero eso no significa que no haya acción. Destaca otro virtuoso plano secuencia -en cámara subjetiva desde el interior de un coche de la mafia rusa- que precede a una pelea del protagonista contra sus enemigos. Esta escena confirma -para mí- que los autores de la serie han conseguido que Daredevil sea un héroe verdaderamente inquietante: sus apariciones espectrales transmiten el miedo que deben sentir los criminales. Nunca he sentido esa inquietud viendo una película de Batman.
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